El Castillo está situado dentro de la localidad. Más que de castillo residencial debería hablarse de fortaleza, pues fue diseñado, en un principio, como tal. Así lo atestiguan los retos que nos han quedado, tales como algunos muros y torreones, el paseo de ronda, el foso y varias estancias interiores, destinadas al uso de la guardia y dependencias personales del alcaide.
Actualmente se puede visitar el museo permanente del tesoro de Torredonjimeno, donde se exhibe una copia de éste junto con información diversa.